jueves, 7 de febrero de 2013

INDIVIDUO, SOCIEDAD Y RESPONSABILIDAD


 
El 22 de diciembre de 1950 Albert Einstein escribió esta carta abierta a  la Society for Responsability in Science:

   El problema de cómo ha de actuar el hombre si su gobierno prescribe acciones o la sociedad espera un comportamiento que su propia conciencia considera erróneo es, sin duda alguna, muy antiguo. Es fácil decir que no puede considerarse responsable al individuo por actos ejecutados bajo una presión irresistible, porque el individuo depende plenamente de la sociedad en la que vive y ha de aceptar, en consecuencia, sus normas. Pero la misma formulación de esta idea deja bien patente hasta   qué punto tal concepción contradice nuestro sentido de la justicia.

   La presión externa puede, en cierta medida, reducir la responsabilidad del individuo, pero eliminarla, nunca. En los juicios de Nuremberg se dio por supuesto este principio. Todo lo moralmente importante de nuestras instituciones, leyes y costumbres puede deducirse de la interpretación del sentido de la justicia de innumerables individuos. Las instituciones son impotentes, en un sentido moral, a menos que las apoye el sentido de la responsabilidad de individuos vivos. Todo esfuerzo por elevar y fortalecer este sentido de la responsabilidad del individuo es un importante servicio a la humanidad...